Safety
El Programa HIRA
Durante 35 años, la misión de DAN Europe ha sido y continúa siendo, hacer que el buceo sea más seguro. Esto se ha conseguido ofreciendo asistencia y asesoramiento médicos al buceador, realizando investigaciones y compartiendo este conocimiento, desarrollando cursos de primeros auxilios y promoviendo campañas de seguridad. Ahora, damos un paso más allá lanzando una iniciativa global de seguridad en el buceo, dirigida a centros y profesionales del buceo, pero en beneficio de todos los buceadores.
El buceador
Cuando la mayoría de los buceadores eligen un destino de buceo, las elecciones se realizan en función de lo que los buceadores desean ver o del país o región que desean visitar. Entonces, generalmente, cuando eligen el hotel, miran los servicios ofrecidos, cuán lujoso es el hotel, cuán agradables son las habitaciones, o simplemente el número de estrellas que tiene el establecimiento, ya que es una buena y rápida identificación de lo que puede esperarse.
¿Y cuando seleccionan el centro de buceo? A veces, esta selección no es realmente una elección libre, ya que el hotel podría tener su propio centro de buceo o colaborar con uno. O bien, el centro es seleccionado en función del precio de la inmersión. O tal vez según la distancia desde el hotel al centro de buceo, o incluso por el tipo de inmersiones que ofrecen. Pero, ¿cuántos buceadores lo eligen teniendo en cuenta el factor más importante al bucear? ¿Cuántos buceadores consideran el aspecto de la seguridad? ¿Quién realmente piensa acerca de cuán seguro es un centro de buceo, o se preguntan cómo actuará su personal en caso de emergencia? Desafortunadamente, este es uno de los criterios de selección más subestimados, pero la razón no es porque el buceador no esté interesado en ello, sino porque no existe una identificación clara que realmente ayude al buceador a comprender este importante criterio de selección. Por lo tanto, la mayoría de los buceadores simplemente presumen que la seguridad no es un problema (como es de esperar) y piensan que el centro de buceo lo tiene todo cubierto, todo controlado. Sólo cuando ya están buceando con el centro, el buceador puede descubrir que realmente existen algunos puntos preocupantes acerca de la seguridad. Pero incluso en este caso, cuando en realidad es demasiado tarde para cambiar su elección, el buceador no está evaluando todo lo necesario para determinar si un centro de buceo funciona de manera segura. Probablemente porque un buceador, al azar, no cuenta con el conocimiento y las herramientas necesarios para evaluar el nivel de seguridad y preparación de un centro de buceo, y ésto, ni siquiera debería esperarse de ellos.
Ahora supón que, al reservar tu próximo viaje de buceo, en realidad sí que existe una forma de identificar el nivel de seguridad y preparación del centro o del crucero de buceo. Del mismo modo como solemos tener estrellas para hoteles, estrellas para restaurantes o incluso, estrellas para vinos. Un sistema que puede mostrarte si el centro de buceo con el que deseas bucear tiene los conocimientos necesarios para hacer que tus inmersiones sean seguras y que dispone de todo lo necesario para responder adecuadamente a una emergencia.
El centro de Buceo
Los profesionales del buceo, durante su curso de instructor, reciben la formación adecuada para que puedan guiar o enseñar a los buceadores de forma segura. Debido a que no puede enseñarse la experiencia, la mayoría de los profesionales de buceo empiezan a trabajar para un centro o una escuela de buceo y, después de cierto tiempo, cuando estén seguros y tengan más experiencia, incluso podrán abrir el suyo propio. Pero no existe un curso real que les enseñe a gestionar un negocio de modo seguro y sostenible. Sí, es un negocio y, como todas las demás empresas, el propietario tiene la responsabilidad de evitar que tanto el personal como los clientes se enfrenten a riesgos innecesarios y se lesionen, al tiempo que se asegura de que el negocio siga siendo sostenible. Ser un Instructor de buceo experimentado no significa automáticamente que tienes la misma experiencia para dirigir una operación de buceo. Los propietarios de centros de buceo pueden no considerar todos los riesgos relacionados y / o no tienen planes de acción de emergencia para reaccionar a diferentes tipos de emergencias.
Al referirnos a los riesgos, no pensamos solamente en la inmersión real, sino que también debemos considerar la seguridad contra incendios, la ergonomía del ruido, aspectos ecológicos, la salud y la seguridad ocupacional, y otros. ¿Quién realizó una evaluación de riesgos en su centro de buceo? Y si se hizo, ¿de que manera se comunica ésto a los clientes? ¿Debería un centro de buceo, que ha invertido tiempo y energía en hacer que sus operaciones sean seguras, no mostrarlo al cliente?
En la actualidad, los centros de buceo no tienen una forma de mostrar su nivel o su grado de preparación. Y si el centro de buceo redujo los riesgos al mínimo y el cliente no lo ve, ello lleva a los buceadores a no considerar el aspecto de la seguridad y a suponer que todos los centros de buceo son iguales en lo que a la seguridad se refiere.
La Identificación de los Peligros y la Evaluación de los Riesgos (HIRA)
El programa DSP de DAN se basa en la identificación y evaluación de los riesgos (Hazard Identification and Risk Assessment, HIRA). Alcomprender mejor los riesgos presentes en una operación de buceo, es posible reducirlos al mínimo. Al aumentar la conciencia y mitigar el riesgo, podemos aumentar la seguridad en el buceo.
Debido a que cada centro de buceo es diferente y los riesgos varían, no existe una única solución y, por lo tanto, es crucial que el propietario del centro de buceo se involucre en un proyecto educativo que lo ayude a comprender los riesgos. DAN quiere acompañar al propietario del centro de buceo a través de esta vía educativa, aumentando paso a paso su conocimiento y ayudándole a cumplir con los requisitos previos necesarios.
Dado que hay muchos aspectos que deben considerarse a la hora de ayudar a los centros de buceo a aumentar gradualmente la seguridad, el programa DAN DSP se divide en 3 niveles. Para cada nivel existen requisitos específicos.
Para el primer nivel o nivel básico (HIRA I), requerimos los estándares mínimos que cualquier buceador debe esperar de un centro de buceo (o de un profesional del buceo). El material básico de primeros auxilios y personal capacitado para brindar dichos primeros auxilios, forman parte de estos requisitos; pero también incluyen la necesidad de contar con algunos Procedimientos Operativos Estándar básicos (como las explicaciones sobre seguridad) y los Planes de Acción ante una Emergencia (Emergency Action Plans, EAP).
Para el nivel 2 (HIRA II), el estándar se plantea de manera significativa y, junto con, por ejemplo, más Procedimientos Operativos Estándar y Planes de Acción de Emergencia, solicitamos un Plan de Sostenibilidad Ambiental y la práctica regular de simulacros de emergencia. Con el fin de proporcionar servicios más seguros a los buceadores y poder responder adecuadamente a emergencias de buceo de manera efectiva y rápida, los centros de buceo (o profesionales del buceo) deberán realizar el esfuerzo necesario para establecer sus EAP. Esta no es una tarea fácil, pero seguramente establece la diferencia. Por lo tanto, quién cumple con los requisitos del Nivel II está haciendo un gran esfuerzo para que su operación o sus servicios de buceo, sean más seguros.
El tercer nivel (HIRA III) es donde el centro de buceo se distingue de los demás. Para llegar hasta aquí, el centro de buceo realmente tendrá que adoptar la cultura de la seguridad del buceo. Quienes participen en HIRA III serán guiados a través de un proceso completo de identificación de peligros y evaluación de riesgos; pero en lugar de simplemente hacer un HIRA, proporcionamos al propietario del centro de buceo las herramientas para que ellos mismos lo realicen. Los formamos para comprender los riesgos presentes en cada aspecto de su negocio de buceo y les proporcionamos los conocimientos necesarios para mitigar esos riesgos y para realizar evaluaciones y mejoras continuas, con el fin de mantener su operación de buceo lo más segura posible. Como no es fácil tener en cuenta todo tipo de aspectos de la seguridad, DAN también brinda ayuda y asistencia a los centros de buceo que afrontan dificultades para llegar a este nivel de excelencia. A través de una red de Coordinadores de Oficiales de Seguridad en el Buceo, unos profesionales formados y entrenados para realizar las evaluaciones de los riesgos y su mitigación, podemos asociarnos con centros de buceo que estén dispuestos a hacer que su negocio sea más seguro y brindarles, así, la asistencia necesaria.
Alternativamente, es posible que un grupo seleccionado de profesionales del buceo, experimentados, se capaciten como Oficiales de Seguridad en el Buceo (Diving Safety Officer, DSO). De esta forma, el centro de buceo puede tener su propio DSO, controlando la seguridad en sus propios centros de buceo.
Distinguiéndose del resto y proporcionando al buceador las herramientas necesarias para seleccionar un centro de buceo
Volviendo a la idea de que, al reservar un viaje de buceo, sería genial tener una forma para identificar previamente el nivel de seguridad y preparación del centro de buceo al elegirlo, en realidad ahora disponemos de todas las herramientas necesarias para que esto suceda.
Incluso si varias organizaciones de buceo ya identifican diferentes niveles de centros de buceo, según los servicios ofrecidos o basados en requisitos previos establecidos por una única organización de buceo, gracias al programa DSP / HIRA ahora es posible tener en cuenta todo el aspecto de la seguridad, haciendo que el programa esté disponible globalmente para los centros de buceo de todas las organizaciones.
Los centros de buceo o profesionales que lleguen a HIRA I, II o III tendrán la posibilidad de mostrar dicho nivel a la comunidad de buceadores, mostrando la respectiva declaración de cumplimiento de HIRA. De esta forma, sus esfuerzos serán recompensados, podrán diferenciarse de los demás y para el buceador será posible seleccionar el centro de buceo que se preocupa por la seguridad de sus buceadores. Una vez que un centro cumpla con el HIRA III, también podrán solicitar a DAN una evaluación de riesgos adicional en su centro de buceo y recibir un informe por escrito y la certificación HIRA de parte de DAN.
La participación en el programa HIRA no cuesta nada, pero es una forma que DAN utiliza para aumentar la seguridad del buceo y cumplir con su misión. ¡El único coste va a ser el tiempo y el esfuerzo real que el centro de buceo o el profesional ponen para llegar a un nivel donde también marquen la diferencia en la seguridad en el buceo!
Todos aquellos centros de buceo o profesionales que apuesten por completo por la cultura de la seguridad en el buceo y se esfuercen por lograr tener una operación de buceo libre de incidentes y accidentes, pueden participar en este programa. Asi, toda la comunidad de buceadores se beneficiará con los resultados.
Al igual que con las Campañas de seguridad promovidas por DAN, todo ello es posible gracias a las cuotas de afiliación a DAN.